domingo, 20 de febrero de 2011

Mas Poesia

Ando estos dias revolviendo entre mis libros, buscando entre mis recuerdos palabras que me inspiraron. Las primeras fueron las que llegaron de la expresion mas simple y ritmica. Cuando empeze a aprender el castellano el ritmo que transmitia la poesia me encandilaba.

Yo que vengo de una lengua tan poetica como es el Euskera, me encontre al principio con una lengua hosca, burda que no tenia sentido para mi. Me parecia dura, extraña. Cuando desde tu infancia has usado otra lengua mas poetica y mas ritmica.

Pasaron años hasta que le cogi algo de estima al castellano. Al final se ha convertido en mi idioma mas utilizado aunque aun echo de menos mis raices. Aunque se use mas el castellano al final el significado de las cosas lo tengo en mi lengua materna.

Gracias a esta joya que es la poesia, por lo menos encontre un lazo de union, un acicate para vincularme algo mas con el castellano. Reconozco en una epoca de mi vida que no lei mas que poesia y teatro antiguo, me encantaba y me hechizaba.

En eso de la lectura tambien fui demasiado rapido. Lei novelas antes de tiempo. Novelas que me impactaron porque me contaron cosas que no comprendia. Al menos mi afan investigador me llevo a querer saber siempre mas.

Aun mantengo esas ganas de saber, esa capacidad de sorpresa. Todo lo de mi alrededor me interesa. Nada me resulta indiferente. Absorvo como si todo fuera aprenhensible. Esta capacidad innata de observacion me encanta.

Pero eso creo que son otras cosas algun dia os contare mas.

Os dejo con una poesia de Juan Ramon Jimenez. Es muy conocida. Habla de la poesia pero yo creo que se podria aplicar a la vida tambien. Espero que os guste.

Vino primero pura,
vestida de inocencia;
y la amé como un niño.  


 Luego se fue vistiendo
de no sé qué ropajes;
y la fui odiando sin saberlo.  


 Llegó a ser una reina
fastuosa de tesoros...
¡Qué iracundia de hiel y sin sentido! 


Mas se fue desnudando
y yo le sonreía. 


Se quedó con la túnica
de su inocencia antigua.
Creí de nuevo en ella. 


Y se quitó la túnica
y apareció desnuda toda.
¡Oh pasión de mi vida, poesía
desnuda, mía para siempre!

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